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Jack London

Biografía

Jack London, cuyo verdadero nombre era John Griffith London, nació el 12 de enero de 1876. Su madre era una mujer extravagante, aficionada al espiritismo y la astrología. Se cree que su padre debió ser William Henry Chaney, periodista, abogado y astrólogo. Debido a la mala salud de su madre el joven Jack fue criado por una antigua esclava negra que se convirtió en su segunda madre. En 1876 su auténtica madre se casó con John London, un tranquilo granjero, que fue quien le dio a Jack su apellido. Cuando Jack tenía catorce años, la familia se trasladó a Oakland. Allí, en los muelles de la ciudad, comenzaron su atracción por el mar y por la bebida, y sus contactos con la delincuencia. En 1892 se enroló en un barco que se dirigía al mar de Boering a cazar focas. Cuando un año después regresó a San Francisco se encontró una situación económica catastrófica: el paro y el hambre asolaban el país. Leía siempre que le quedaba algo de tiempo y en noviembre de 1893, con diecisiete años, consiguió el primer premio en un concurso literario convocado por el periódico «Col»l. Esto le hizo albergar ilusiones de dedicarse a la literatura, pero el éxito tardaría todavía en llegar, por lo que siguió ejerciendo distintos oficios: trabajó en una fábrica de hilados de yute y en una central eléctrica hasta que abandonó estos trabajos, debido al escaso salario que recibía. En 1894, la mala situación económica del país provocó la aparición de distintos movimientos sociales de protesta, a los que se unió. Pero estas reivindicaciones no fueron atendidas y el escritor se dedicó entonces al vagabundeo hasta que fue detenido y enviado a la prisión de Niagara Falls. Allí cumplió una condena de un mes que lo marcaría para toda su vida: conoció el mundo de la delincuencia y la marginación y nació en él una fuerte conciencia social que lo llevó a alistarse en el incipiente partido socialista de Oakland. London sería socialista durante toda su vida estudiando el marxismo y el pensamiento revolucionario de su época. A los diecinueve años volvió a la Escuela Secundaria y poco después ingresó en la Universidad de California, pero en 1897 la abandonó y se fue a Alaska, atraído por la fiebre del oro. El escritor, que fue a hacer fortuna, regresó un año después enfermo y sin oro, pero con una experiencia que habría de hacerle rico y famoso. Cuando regresó de Alaska su padrastro ya había muerto y London comenzó a escribir para mantener a su familia. Así, en 1899, publicó «Una odisea nórdica», obra que lo hizo famoso, y «El hijo del lobo». Siguió publicando: «Colmillo Blanco» (1906), «El talón de hierro» y «La carretera» (1909), «Martín Eden» (1913), etc. En esta última novela de carácter autobiográfico, London retrata las dificultades y miserias que acompañaron a su iniciación literaria: la penuria, las largas horas de trabajo, los fallidos intentos de publicar sus relatos, los primeros triunfos... y, por fin, el enorme éxito de sus primeras novelas. Hay dos fuerzas opuestas y contradictorias en el pensamiento de Jack London: por una parte su individualismo, fruto de su propia experiencia vital -fue un niño pobre y sin padre conocido que pasó hambre y que con su esfuerzo llegó a ganar una fortuna-; y por otra, su pensamiento político, cercano al socialismo. En los últimos años de su vida su avanzado alcoholismo le provocó un importante deterioro físico y mental, que le llevó a descuidar su labor literaria, por lo que empezó a ser ignorado por los críticos. Todo ello minó su personalidad segura y romántica. London, desahuciado por los médicos, utilizaba la morfina y la heroína como analgésicos. Una noche, cerca ya de la madrugada, se administró una sobredosis mortal de drogas. Todos los intentos de salvar su vida fueron inútiles y su agonía se prolongó durante más de doce horas. Murió el 22 de noviembre de 1916 a los cuarenta años de edad.

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