Guachibolero
Nada más fácil que hacer un guachibolero. Solo necesitas un embudo, medio metro de cordel fino, una pelota de pimpón y cinta adhesiva.
Ata un extremo del cordel al tubo del embudo. Sujeta con cinta adhesiva, al otro extremo de la cuerda, la pelota de pimpón, ¡y ya está! Balancea el guachibolero para lanzar la bola al aire y tratar de atraparla con el embudo.

Haz tu campana
Busca una maceta de barro y píntala a tu gusto. Modela una bola con arcilla y, antes de que se seque, hazle un agujero que la atraviese (también puedes utilizar una bola de madera con un agujero). Colócale una cuerda, tal como ves en la ilustración, y ya tienes tu campana «tolón-tolón».

Paisaje de cristal
Reúne este material: un frasco de cristal transparente con tapa de rosca, plastilina de colores, pegamento resistente al agua y brillantina.
- Modela con plastilina, sobre la parte interior de la tapa, un paisaje de colores vivos.
- Pega el paisaje a la tapa con la cola resistente al agua.
- Pídele a un adulto que hierva agua, deja que se enfríe totalmente y llena el frasco con ella.
- Vierte en el agua una cucharadita de brillantina.
- Cierra fuertemente el frasco y dale la vuelta.
- Acabas de construir un maravilloso paisaje de cristal.

Aire acondicionado
Necesitas lo siguiente: una tira de papel de 30 x 14 cm, dos palos planos de polo, pegamento y lápices de colores.
1. Haz un dibujo de vivos colores en la hoja.
2. Pliega la hoja en forma de acordeón, haciendo un pliegue a la derecha y otro a la izquierda. Todos los pliegues deben ser iguales.
3. Aprieta bien el conjunto plegado y dóblalo por la mitad.
4. Pega los laterales interiores entre sí y luego los laterales exteriores a las tablillas.

Acabas de confeccionar un fantástico abanico: auténtico aire acondicionado para los días calurosos.

Actividades de El libro del buen humor, de Pedro María García Franco.